domingo, 7 de enero de 2007

Ciudad Blanca....

Hoy Sucre, la ciudad blanca en una tarde dominical y con paisaje afín...
Iglesias por donde pasea la mirada, balcones y rejas, a cual más barroca que la otra. Los españoles y su santa iglesia definitivamente dejaron su impronta indeleble en la arquitectura de la ciudad y desgraciadamente en lugares menos visibles y mucho mas dolorosos.
Caminamos, carteles de una Bolivia unida cuelgan de la Casa de la Independencia, de la Biblioteca. Frente a un puesto de diarios y de manera muy casera un cartel explica el detrás de escena del plan secesionista de Santa Cruz, una historia de ligas fascistas croatas-cruceñas, oligarcas y la defensa de sus estandartes de orden y progreso.
Antes los españoles, ahora los croatas????
Así parece, la historia se repite igual con distintas máscaras...
Entro a la Casa de la Cultura, Feria Popular del Libro, precios populares y libros también. Encuentro dos joyitas y compro "Úselo y Tírelo" dice Galeano y le creo, el Che me invita a andar en sus Diarios de Motocicleta...
Por ahora habrá que tragarse el amargor y seguir viaje...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

El nombre no importa, los que se han querido separar son siuempre los mismos y la carne de cañón: idem.
Es curiosos ver la cíclica de la historia y sus errores fundamentales. Seremos el tuvo de ensayo de Fukuyama, o como se llame el ponja generador de la teoría del fin de la historia???
Bueno sakele cosas lindas a la experiencia ke pa mirarnos las pelusas del ombligo sobran locos. Muestranos los tesoros, las historias minimas, tus ojitos linda.
Beso

Anónimo dijo...

Querida julita tu mamà me leyò lo que has escrito de tus vivencias, me parece hermoso como describes. Diariamente rezo para que vos y Teresita tengan la protecciòn que necesiten. Te besa tu padre y que los àngeles me la cuiden a Ud. y a Teresita.

GER! dijo...

No sé si hay territorio libre del dolor ocasionado por las ansias de poder del hombre. Tal vez sólo cambien las máscaras, las tácticas de dominio y las formas de sobreponerse al dolor.
Si eligiera un souvenir de un viaje, definitivamente un libro sería una buena opción. Siga contando capitana, que desde aca tamos atentos.