miércoles, 21 de marzo de 2007

Amo a Juana. Ella me banca siempre, compartimos calles y lugares, nos gusta bañarnos de sol y viento en la cara. Me hace ser libre, puedo ir y venir y nunca se queja...

A veces Juana se cansa de mí, de tanto andar y quiere quedarse sola, irse lejos y se corta...

Se corta los frenos en plena bajada de Boulevard San Juan y por un momento me hace sentir lo que puede ser mi vida sin ella y sin mí.

Igual amo a Juana, amo mi bici.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Dos cosas:
1. Lo que viste en mi flog es un homenaje a nuestra conversación, sin ti, no sale nada de nada. Es tuyo.

2. Que buen relato de la cleta. Cuánto extraño mi armatoste privado con el que soy veloz, libre y potentemente raudo.

Besos mi Juli.

Cristalina dijo...

nena, tengo una foto en el mismo lugar y con la misma bici. Coincidencias.